- Dejar sonar el despertador, y acurrucarte y soñar con unos minutos más en la cama calentita.
Mirar la hora y levantarte corriendo!
(En el mío dice 4:00 am)
Lavarte los dientes y pensar en todo lo que tenes que llevar, y con la suerte de que la cabeza, la tenemos pegada.
Desayunar o no hacerlo.
Escuchar una bocina, de papá, del remis, de un taxi, de quien viene por ti.
Ponerte el tapadito que convine con lo que tenés puesto, la campera más larga o buscar una bufanda o un gorrito a último momento!
Viajar a la universidad y quedarte dormida en el colectivo. Porque la noche anterior, nos matamos estudiando.
Que el chico más lindo que te haya hablado te diga, “Si te quedabas dormida, te iba a despertar” y pensar “No! que horror.”
Esa es mi vida cotidiana, de la cual me estoy cansando, y si no supiera tan bien lo que quiero la hubiera abandonado. Paris, voy por ti!