Habrá que desenvainar las espadas del texto,
Y escribir una canción aunque no haya algún pretexto,
Y escribir una canción aunque no haya algún pretexto,
y dedicársela al primero que pase caminando,
al que se quedó pensando, al que no quiere pensar,
al olvido selectivo, a la memoria perdida,
a los de los pedazos de vida que no vamos a perder... jamás.
O es una serpiente de muchas cabezas...
ResponderEliminarAsi es!
ResponderEliminarEstaria bueno cruzarme con gente como vos en mi recorrido y no que me caguen a puteadas cada ves que trato de explicarles el por que de tomar conciencia...